Tener una piel joven, bonita y cuidad no es una tarea fácil. Nuestra piel, especialmente la de la cara, no sólo sufre el paso del tiempo, sino también una exposición constante a los agentes externos. El frío, el sol, el tabaco o la polución se convierten en enemigos cuando de cuidar la piel se trata.
En los Centros de estética contamos con tratamientos específicos según el problema o zona a tratar. Sin embargo, si no seguimos unas rutinas en casa todo que nuestra esteticista ha conseguido podemos perderlo con el paso del tiempo.
¿Qué tenemos que incluir en nuestra rutina?
- Limpieza: es el primer paso y posiblemente uno de los más importante, ya que sin una buena limpieza las glándulas sebáceas y sudoríparas (que emiten secreciones) taponan los poros al juntarse con los restos acumulados del ambiente durante el día. Es fundamental limpiar el rostro tanto por la mañana como por la noche con un gel o crema específica dependiendo del tipo de piel.
- Tónico: este producto que casi todas tenemos pero que en muchas ocasiones no tenemos muy claro para que sirve, se encarga de reequilibrar el pH natural de la piel al tiempo que favorece su regeneración.
- Contorno de ojos: la zona que rodea el ojo es una de las zonas más delicadas del rostro debido a lo fina que es una piel 10 veces más fina que el resto. Por este motivo, no hay que ser perezosa y hay que dedicarle unos minutos todos los días. Lo ideal es cuidar esa piel tan sensible aplicando el contorno de cuidado específico, ya sea para arrugas, bolsas u ojeras.
- Sérum: está destinado a aportar vitaminas, minerales y oligoproteínas al cutis. Puedes combinar varios o incluso, alternarlos dependiendo de las necesidades a tratar.
- Crema hidratante:el cuidado de día debe ser más ligero y contener SPF contra la radiación solar en todas las épocas del año. Hay que tener cuidado, ya que aplicar el maquillaje después de la crema puede hacer que esa protección pierda efectividad. La dermis está compuesta en un 70% de agua, y la epidermis en un 15%. Para mantener un buen nivel de hidratación, es importante utilizar un cuidado diario hidratante que equilibre el nivel de agua de la piel. Por la noche debemos utilizar un producto más nutritivo y regenerador, ya que durante la noche es cuando se produce el proceso de regeneración celular.
- Exfoliación: es indispensable realizarla una o dos veces por semana para eliminar las células muertas de la epidermis y otras impurezas.
- Aplicación de una mascarilla específica al menos una vez por semana para poder atajar los problemas que más nos preocupen.
- Ampollas que contengan concentrados para que la piel se reafirme, resplandezca, se suavice o reafirme, que calmen, desestresen, rejuvenezcan… Hay muchos tipos de productos que favorecen recuperación de la piel, pero no es necesario usarlos todos, asesórate de los que necesitas antes de empezar.
Para la elección tanto de tratamientos en cabina como para elegir los productos que tu piel necesita en función de su naturaleza y problemas específicos, lo mejor es dejarse aconsejar por tu esteticista.
